TDAH y Psicofármacos
Elaborado por el equipo base de
Carabanchel del Partido Humanista
Introducción
Julio. 12
años. Tiene una situación familiar y social muy difícil, con una madre en paro
y que ha sido desahuciada de su casa por no poder pagar la hipoteca. Apenas
tiene contacto con su padre. Tiene dificultades en el colegio para seguir el
ritmo de los demás niños y ya ha sido etiquetado como problemático.
Maria. 8
años. Ha sufrido recientemente el divorcio de sus padres. Es muy inteligente y
saca buenas notas en el colegio, pero es inquieta y no hace caso a los
profesores y les reta y contesta a veces.
Eduardo. Es un
niño adoptado. En su país de origen pasó situaciones de extrema dificultad. No
se concentra en los estudios.
Laura. 7
años. Es una niña que vive en su mundo, un poco desconectada y no atiende en
las clases. Sus padres apenas tienen tiempo para ayudarla en los estudios y se
va quedando rezagada.
Pedro. 9
años. Sufrió un cambio de colegio y de barrio el último año y no se adaptó a su
nuevo ambiente. Sufrió acoso escolar y fue marginado por sus compañeros. En el
anterior colegio no tenía problemas.
Todos estos
niños y niñas son casos que conocemos. Ninguno de ellos tenía algún trastorno
genético o neurológico que pudiéramos apreciar, pero todos ellos han sido
diagnosticados con TDAH. Algunos padres y madres se han negado a medicarles,
pero otros si han aceptado ante la recomendación de médicos, profesores y
psiquiatras.
Todos ellos
tienen en común que sufren distintas situaciones de desestructuración social y
familiar (divorcios, desempleo, falta de comunicación con los padres,
adopciones) Situaciones que sin duda les han afectado y se ha reflejado en su
conducta.
No han tenido
en su ambiente escolar y social el apoyo que necesitaban, y lo que el sistema
ha determinado es darles una medicación que al menos haga que los “molestos”
síntomas que han desarrollado dejen de ser un problema. La cuerda se ha roto
por el lugar más débil, la de aquellos que no pueden reclamar sus derechos y
los que menos son responsables de la situación en que viven.
Conociendo de
primera mano estas situaciones, y con los antecedentes que los humanistas tenemos
en este campo, decidimos profundizar un poco en lo que está pasando con los
menores en este momento.
A continuación
mostramos un resumen de lo que hemos averiguado
II. Antecedentes.
II. Antecedentes.
A mediados de
los años 60 un grupo de psiquiatras americanos empiezan a incluir nuevas
“enfermedades” en su manual de trastornos mentales (DSM). Una de ellas es el
TDAH, que fue definido como “trastorno” específico de la infancia.
“El TDAH
es un trastorno de inicio en la infancia que comprende un patrón persistente de
conductas de desatención, hiperactividad e impulsividad. Se considera que el
trastorno está presente cuando estas conductas tienen mayor frecuencia e
intensidad de lo que es habitual según la edad y el desarrollo de la persona, y
tales manifestaciones interfieren de forma significativa en el rendimiento
escolar o laboral, y en sus actividades cotidianas” (DSM-IV-TR, 2001)
El diagnóstico
se suele realizar al comenzar la educación primaria, cuando aparecen problemas
en el rendimiento escolar (deberes incompletos, poco organizados y con
errores), el niño se distrae fácilmente, habla impulsivamente, responde antes
de acabar la pregunta, y se observa disfunción social (conducta desadaptada en
el aula, dificultades para aceptar las normas, agresividad, interrumpe y se
entromete en todo, etc.).
Junto con el
TDAH se “crearon” nuevas “enfermedades”, que anteriormente no eran considera-
das tales. Hoy día se habla de “Trastorno de Ansiedad”, “Trastorno de Duelo” o
de “Trastorno de la
Personalidad por Evitación”, antes conocido como timidez.
En estos años
se ha extendido una corriente de psiquiatría de tendencia zoologicista,
que quiere influir en la conducta humana mediante la química y que sostiene que
los psicofármacos solucionarán todos los problemas de la vida humana. Coincide
esta eclosión de nuevos tras- tornos mentales y el auge del rol de la Psiquiatría como
mecanismo de control social con el in- cremento de las protestas juveniles
contra la guerra de Vietnam y por los derechos civiles de las minorías raciales
que amenazan con desbordes sociales. Sin duda hay una relación entre estos dos
fenómenos concomitantes.
Esta visión
zoologicista o biologicista está claramente enfrentada al concepto del nuevo
humanismo sobre la conciencia humana y su intencionalidad.
Tesis del Partido Humanista
Tesis
2.4. La existencia humana está abierta al mundo y opera en el intencionalmente.
Inclusive puede negarlo radicalmente mediante el suicidio y la destrucción. La
existencia puede nihilizar al mundo (y, por tanto al cuerpo, a la naturaleza
y/o a la sociedad), o humanizar al mundo.
Tesis
2.5. Por consiguiente, la existencia humana es libertad en tanto afirmación o
negación del mundo. La intencionalidad humana permite afirmar o negar
condiciones y, por tanto, no ser simple “reflejo” de ellas.
“Contigua
a la concepción de la naturaleza humana, ha estado operando otra que nos habló
de la pasividad de la conciencia. Esta ideología consideró al hombre como una entidad
que obraba en respuesta a los estímulos del mundo natural. Lo que comenzó en
burdo sensualismo, poco a poco fue desplazado por corrientes historicistas que
conservaron en su seno la misma idea en torno a la pasividad. Y aún cuando
privilegiaron la actividad y la transformación del mundo por sobre la interpretación
de sus hechos, concibieron a dicha actividad como resultante de condiciones
externas a la conciencia. Pero aquellos antiguos prejuicios en torno a la
naturaleza humana y a la pasividad de la conciencia hoy se imponen,
transformados en neo-evolucionismo, con criterios tales como la selección
natural que se establece en la lucha por la supervivencia del más apto. Tal
concepción zoológica, en su versión más reciente, al ser trasplantada al mundo
humano tratará de superar las anteriores dialécticas de razas o de clases con
una dialéctica establecida según leyes económicas “naturales” que autoregulan
toda la actividad social. Así, una vez más, el ser humano concreto queda
sumergido y objetivado.”
Hacia 1980 se
inicia un crecimiento sostenido de diagnósticos que adquiere carácter de incontrolable
epidemia global a fines de siglo. Anteriormente a niños inatentos,
inconsecuentes y muy movidos, particularmente si había dificultades específicas
del aprendizaje como la dislexia, se les atribuía un “daño cerebral mínimo”
(minimal brain damage) o “hiperactividad”, cuya frecuencia era baja.
Los psiquiatras
calcularon que un porcentaje entre el 5 y el 15% de la población infantil
padece TDAH y hoy día, uno de cada ocho niños estadounidenses toma
metilfenidato, el fármaco más utilizado para tratar el TDAH.
Según datos del
Centro de Control de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, una de las
instituciones sanitarias estadounidenses más grandes, se ha diagnosticado
con TDAH al 15% de los chicos que están en colegios e institutos y el
número de niños con medicación para el trastorno se ha disparado hasta los 3,5
millones, en comparación con los 600.000 que había en 1990, el 80% de ellos
son latinos, negros y chicanos, y que su expansión comenzó en los barrios
mas conflictivos como Harlem, Bronx, etc.
En España ha
sucedido una situación similar, entre los años 1992 y 2001 el uso del
metilfenidato se ha multiplicado por seis (Criado et al., 2003)21, un
incremento inferior al experimentado en Estados Unidos. Ha vuelto a dispararse
en 2004 coincidiendo con la comercialización del metilfenidato en liberación
prolongada, el fármaco “estrella”. Hoy nos encontramos entre los mayores
consumidores mundiales de esta droga y en crecimiento exponencial.
El psiquiatra
español Mariano Almudévar ha sintetizado el estado actual del TDAH en un
completo informe que podemos consultar en internet, y del que rescatamos el
siguiente párrafo:
En la
actualidad el TDAH ya no se considera solo un trastorno infantil, que tendía a
desaparecer con los años, se considera una enfermedad genética que afecta
también a los adultos.
El diagnóstico
del TDAH sigue basándose en el DSM, manual de trastornos mentales americano. Se
trata de un test que se basa en la observación de unos síntomas muy vagos y que
cualquier persona puede mostrar.
El TDAH se
considera ahora en tres variantes, una de hiperactividad, otra de inatención y
una tercera mixta.
A continuación
mostramos los tests para determinar la hiperactividad o la inatención.
III: Los cuestionamientos sobre el TDAH
Muchos
colectivos, psiquiatras, psicólogos, médicos, etc. han cuestionado la
existencia del trastorno, la validez de esta forma de diagnóstico y
su tratamiento farmacológico. Casi todos afirman lo siguiente:
·
Los síntomas que caracterizan el TDAH
muy posiblemente pueden deberse a las circunstancias sociales y personales de
los sujetos que los padecen, y que deberían revisarse los protocolos por los
que se prescribe el consumo de psicofármacos a la población infantil.
·
Los psicofármacos no curan los
trastornos, solo enmascaran los síntomas.
·
Los efectos secundarios de los
medicamentos a largo plazo son muy perjudiciales.
A continuación
mostramos algunos ejemplos:
1. En la década
pasada, la Comunidad
para el Desarrollo Humano, organización humanista, desarrolló una campaña
para denunciar el abuso sobre los menores, obligados a consumir psicofármacos y
la violación de sus derechos fundamentales.
Además de esta denuncia, la Comunidad recogió minuciosamente testimonios y
materiales para fundamentar su campaña y denunció la situación en distintas
instancias.
“Se
trata de un abuso alarmante e injustificado, en donde el Trastorno por Déficit
de Atención e Hiperactividad (TDAH) es sólo la punta del iceberg. El uso de
psicofármacos en niños ha crecido de modo alarmante: El diagnóstico de niños
hiperactivos e inatentos ha aumentado en un 9.000% en 7 años en Inglaterra, por
ejemplo. La fabricación de anfetaminas ha pasado de 2 a 16 toneladas en 7 años y ya
hay un mercado de anfetaminas en los colegios. España ocupa el tercer lugar en
el mundo en número de prescripciones de psicofármacos, a la población infantil.
Europa calcula que el 70% de los psicofármacos administrados no han sido
previamente ensayados en niños, lo cual implica la posibilidad de efectos
secundarios imprevisibles. Los laboratorios farmacéuticos tienen un claro
interés económico en medicalizar los problemas de la vida, y ahora ya existe un
enfermo para cada fármaco.”
Dosier TDAH La Comunidad
2.
La Regional Humanista Europea denunció a
través de su portavoz Giorgio Schultze, el abuso a los menores y la campaña de
las industrias farmacéuticas en Europa para impulsar el consumo de
psicofármacos en los menores. Incluso tuvo lugar en acto de protesta frente al
Ministerio de Sanidad en 2007. La denuncia de esta situación fue considerada
una de las principales prioridades del Nuevo Humanismo y sus organismos.
3.
El Servicio Vasco de Salud ha denunciado en
2013 en un informe sobre el TDAH que afirma que: “en España se realizan
prescripciones fuera de las indicaciones autorizadas, no se están siguiendo las
recomendaciones sanitarias más básicas y prudentes en cuanto a la prescripción
de metilfenidato”.
Descargar informe
4.
El “Consenso de Expertos del área de la salud”,
que han suscrito muchos médicos y psiquiatras infantiles sobre el llamado
“Trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad”, afirma que:
“Nos
hemos encontrado con niños en los que se diagnostica TDAH cuando presentan
cuadros psicóticos, otros que están en proceso de duelo o han sufrido cambios
sucesivos (adopciones, migraciones, etc.) o es habitual también este
diagnóstico en niños que han sido víctimas de episodios de violencia, abuso sexual
incluido.”
5.
El Boletín de Información Farmacoterapéutica de
Navarra publica también en 2013 un informe titulado: Atentos al déficit de
atención (TDAH) Entre la naturaleza incierta y la prescripción hiperactiva, en
el que insiste en las ideas del anterior informe y alerta sobre el incremento
del consumo del metilfenidato y afirma que no están demostrado su eficacia a
largo plazo:
“Con
respecto a los medicamentos se aprecia cierta eficacia en síntomas a corto
plazo sin continuidad clara en las variables relevantes, por lo que deberían
considerarse un recurso de uso excepcional. Destacan los efectos adversos
cardiovasculares, psiquiátricos y endocrinos (algunos raros y muy graves, otros
frecuentes con repercusiones ignoradas). Su relación con el abuso de sustancias
permanece debatida y preocupa la actual tendencia a iniciar tratamientos en
población adulta, máxime cuando la pluralidad de intereses alrededor de este
diagnóstico complica la formación de un juicio prudente.”
6.
Tres importantes científicos españoles publicaron
en 2014 un libro en el que refutan todas las “verdades oficiales” sobre el TDAH
y alertan sobre la peligrosidad del fármaco: Volviendo a la Normalidad. La
Invención del TDAH y del Trastorno Bipolar Infantil. Fernando García de
Vinuesa, Héctor González Pardo y Marino Pérez Álvarez.
“El TDAH
y el trastorno bipolar infantil carecen de entidad clínica: no suponen
diagnósticos con validez, su etiología no se ha identificado por más que se ha
buscado y los marcadores biológicos específicos - genéticos y neurobiológicos -
brillan por su ausencia. Todo ello sea dicho sin menoscabo de que estas
denominaciones, ya usuales, pueden tener que ver, a veces, con importantes
problemas educativos, familiares y escolares.”
Colegio oficial de sicólogos de Madrid
“La
medicación no hace más que enmascarar el problema: “Los medicamentos
psiquiátricos no corrigen alteraciones neuroquímicas que fueran la causa de los
trastornos psicológicos sino que crean una alteración en el cerebro que puede
ser favorable a enmascarar o encubrir síntomas psicológicos. Y esto es algo que
no es opinable, está establecido en la psicofarmacología”.
Reportaje en El Confidencial
7.
El psiquiatra americano Alen Frances, que fue director
del famoso DSM que sirve para diagnosticar las enfermedades mentales, ha
denunciado en diversos medios de todo el mundo, incluidos varios españoles la
situación del TDAH, el sobrediagnóstico, y el abuso en general de los
psicofármacos:
“Gran
parte del incremento de casos de TDAH es el resultado de falsos positivos en
niños a los que les iría mucho mejor sin ser diagnosticados”. E insiste a este
periódico: “Nos estamos gastando en EEUU unos 10.000 millones de dólares al año
en fármacos para el TDAH para tratar a muchos niños que realmente no tienen ese
problema y que están teniendo dificultades por culpa de aulas caóticas. Al
empequeñecerse los presupuestos para educación, se quitó de en medio en muchos
colegios a los profesores de gimnasia. Es mejor gastarse el dinero en colegios
que maldiagnosticar a los niños y tratarles con medicinas caras”.
8. El neurólogo
norteamericano Fred Baughman en su libro “El Fraude del TDAH”,
encabeza junto con varios psiquiatras americanos la oposición en Estados Unidos
al cártel farmacéutico. Niega la existencia del TDAH y recalca la inexistencia
de pruebas relevantes::
”Hicieron
una lista de los síntomas más comunes del campo emocional de los niños; los que
más incomodan a profesores y a padres, y en un movimiento que no podría ser más
desprovisto de ciencia o de motivo hipocrático lo llamaron una “enfermedad”.
9.
La doctora Dra. Mary Ann Block. Osteopata, en su libro No
more Ritalin, se pregunta:
Si no hay ninguna prueba válida para el TDAH, ningún dato que
pruebe que el TDAH es una disfunción del cerebro, ningún estudio a largo plazo
sobre los efectos de las medicinas, y si las medicinas no mejoran los
resultados académicos o las aptitudes sociales y si estas medicinas pueden
causar trastornos compulsivos y emocionales y conducir a la utilización de
drogas ilegales, ¿por qué entonces hay millones de niños, de adolescentes y de
adultos etiquetados con el TDAH? y, ¿a quién se prescribe estas medicinas?
Es evidente que en el diagnostico del TDAH:
1. Se pueden pasar
por alto las circunstancias personales del niño que sin duda afectan a su
comportamiento.
2.
Se pone al niño una etiqueta que le durará de por vida.
3.
Se toma una perspectiva zoologicista o biologicista que suprime
la intención y la subjetividad del niño.
4.
Se receta a los supuestos enfermos un psicofármaco que no solo
no les va a curar, sino que tiene otras consecuencias que veremos a
continuación.
La lista de objeciones sería interminable, la dejamos aquí y
remitimos al informe de La
Comunidad para el Desarrollo Humano para quienes
quieran mayor información
IV. Los fármacos
IV. Los fármacos
El punto más peligroso al que se enfrentan los menores cuando se
les diagnostica TDAH es que el tratamiento más utilizado es a través de
psicofármacos.
La sustancia mas utilizada es el Metilfenidato,
comercializado en marcas como RUBIFEN, CONCERTA o RITALIN.
Para hacernos una idea de su potencia, se trata de una droga que
en la clasificación de la
Drugs Enforcements Agency de los
EEUU está en la misma categoría que la cocaína o la morfina.
Es importante recalcar que este fármaco no ha sido
desarrollado para el TDAH, era un fármaco utilizado anteriormente con fines
muy distintos:
“...el
metilfenidato lo fue durante la segunda guerra mundial. En esta guerra los
estimulantes eran usados en los dos bandos para combatir la fatiga, mantenerse
despierto y mejorar la atención: tropas panzer, kamikaces japoneses y técnicos
de radar aliados los usaron. Después se usaron para tratar la obesidad, y por
camioneros de largo trayecto Estamos hablando de la misma familia de drogas de
la centramina, usada por estudiantes españoles hace ya más de cincuenta años y
del “speed” que se dice mató a Jimmy Hendrix. En los EEUU el uso de
estimulantes es frecuente para hacer “cramming”:
estudiantes en exámenes finales, profesionales que tiene que acabar en fecha y
trabajar día y noche, (http://www.wallstreetoasis.com/forums/ritalin) e
incluso jugadores de baseball, a través de las llamadas “Excepciones
Terapéuticas” que por ahora no se han admitido en el deporte internacional. En
definitiva los estimulantes dan ventajas competitivas a corto plazo.”
Mariano Almudévar
·
Aunque son eficaces a corto plazo y
mejoran la atención a la tarea, no hay evidencia de su efectividad a partir de
los 14 meses o a 3 años de inicio del tratamiento. No soluciona el problema
sino que enmascara los síntomas.
·
Son adictivos, en Estados Unidos hay
un tráfico ilegal de metilfenidato que se conoce como la “cocaína de los
pobres”.
·
Los efectos secundarios, incluso los
descritos en los formularios de los envases, son muy peligrosos: Pérdida de
peso, insomnio, anorexia, retardo del crecimiento, pérdida de apetito, vómitos,
etc. En muchos casos también se han documentado comportamientos psicóticos,
depresivos o suicidas. En muchos casos, después de ser tratados con
metilfenidato, aparecen nuevos trastornos que se tratan con fármacos aun más
peligrosos. De la mano del TDAH se han incrementado muy fuertemente otros
trastornos, como el bipolar, que era desconocido antes del uso extensivo de
estimulantes y antidepresivos.
La lectura de los capítulos Creating the Bipolar Child y
dos siguientes en The Anatomy of an Epidemic de Robert Whitacker,
es escalofriante. ¿Estaríamos asistiendo además del invento de trastornos
mentales y del fomento de la cronicidad en los más reales como las psicosis, a
la producción de una población de discapacitados por causas
iatrogénicas, Estadísticas de 2008 en USA, de pésimo
pronóstico y con consecuencias sociales, humanas y económicas nada
tranquilizantes? Más allá de cuestiones de cosificación y mercantilización de
la experiencia o de las dudas que uno pueda tener sobre la interpretación que
Whitacker hace, los altos niveles de supuesta comorbilidad y de polifarmacia en
menores son muy preocupantes.
Consultar Artículo.
Consultar Artículo.
Una reciente investigación publicada en Jornal of
Psychiatric Research apunta la relación entre el consumo de
estimulantes, como el metilfenidato o las anfetaminas, y la aparición de
trastornos psicóticos. Alerta además de que continua aumentando el
diagnóstico de TDAH en los Estados Unidos, donde se han diagnosticado cinco
millones de nuevos casos de TDAH
Aquí se puede consultar la noticia:
Aquí se puede consultar la noticia:
El estudio demuestra una robusta relación entre la prescripción de estimulantes y las psicosis de aparición temprana. Hasta que punto estas psicosis hubieran aparecido más tarde y hasta que punto la asociación con el uso posterior de cannabis aumenta el riesgo, no se determina y por lo tanto no se puede afirmar que causan las psicosis independientemente de otros factores, pero si se puede afirmar que son un factor causal en ciertos casos de psicosis y que la precipitan a edades más tempranas.
El creciente
uso de antipsicóticos, mucho más tóxicos que los estimulantes, que parece
acompañar a estos desarrollos, fuera de las psicosis y en poblaciones
vulnerables y sin atención al consentimiento informado, tiene unas
reminiscencias más bien horribles (Action T4). El uso de
antipsicóticos en poblaciones dependientes y/o excluidas, ha aumentado
enormemente y su facturación en los USA se acerca a los 20.000 millones de
dólares anuales y ha superando a las estatinas como grupo de mayores ventas. La
polifarmacia es frecuente en esas poblaciones. Y este es el modelo que nos
están vendiendo ya en España.
Mariano Almudévar
En la guía
clínica del TDAH se afirma que: El 85% de los pacientes presentaban al menos una
comorbilidad, y cerca del 60% tenían al menos dos comorbilidades, siendo los
más frecuentes el trastorno negativista desafiante, el trastorno
de ansiedad y el trastorno disocial.
El Trastorno Negativista Desafiante: Criterios diagnósticos
1. Un patrón de
conducta negativista, hostil y desafiante que ha durado al menos seis meses,
durante los cuales cuatro o más de los siguientes están presentes:
Nota:
Considérese cumplido un criterio sólo si el comportamiento ocurre más
frecuentemente de lo que es típico para individuos de una edad y nivel de
desarrollo comparables.
1. Pierde los
estribos con frecuencia
2. Discute con
adultos frecuentemente
3. Desafía
activamente o rehúsa acatar las peticiones o reglas de los adultos, con frecuencia
4. A menudo
deliberadamente irrita a los demás
5. A menudo culpa
a otros de sus errores o mala conducta
6. Con frecuencia
aparece enojado y resentido
7. Con frecuencia
se muestra rencoroso o vengativo
2.
La alteración en la conducta causa un impedimento clínicamente
significativo en su funcionamiento social, académico u ocupacional.
3.
Las conductas no ocurren exclusivamente durante el curso de un
trastorno psicótico o del estado de ánimo.
4.
No se cumplen los criterios para trastorno disocial y, si el
individuo tiene 18 años o más, los criterios no se cumplen para el trastorno de
personalidad antisocial.
Si el niño o niña cumple al menos cuatro de los anteriores
criterios, y estos interfieren con su vida normal, entonces técnicamente cumple
con la definición. (DSM)
V. El cártel del TDAH
V. El cártel del TDAH
El “cártel” del
TDAH lo componen los cuatro grandes laboratorios que fabrican los fármacos:
·
Johnson and Johnson, a través de Janssen, fabrica el Concerta.
·
Eli Lilly, productor de Strattera.
·
Rubió, ligada a Novartis-Ciba Geigy productor de Ritalin o Rubifen.
·
Shire, produce el Aderall.
Janssen, englobada
dentro de la estructura corporativa de Johnson and Johnson y con varias ramas
para objetivos de producción o distribución.
Produce el
Concerta, metilfenidato de liberación lenta mucho más caro, aunque ahora
está ya en fase genérica. Se basa en la idea de que el TDAH es como la
diabetes, una deficiencia bioquímica que hay que tratar de manera permanente,
rechazando su uso coyuntural o las descansos medicamentosos, lo que lleva con
mucha más probabilidad a la tolerancia y la cronicidad y al uso
compensatorio por las noches del Risperdal, un antipsicótico también de
Janssen, para calmar al niño.
La risperidona
es un neuroléptico o antipsicótico con efectos opuestos a los estimulantes y es
usado en menores en los trastornos de tipo bipolar, a los que nos hemos
referido antes, como “comorbidos” del ADHD. La idea de que los neurotrasmisores
se pueden manipular al gusto del que receta como un sistema de manivelas + y -,
incluido el uso de dos drogas con efectos opuestos al mismo tiempo y ya está,
hace sospechar la existencia de un mengelismo comercial o un delirio alopático.
Peter Tyrer, un psiquiatra “biologista” convencional de mucha experiencia,
profesor del Imperial College y editor del British Journal of Psychiatry, ha
hablado de neuroleptofilia y de “una mecha lenta hacia el desastre”, en
relación al uso extensivo de antipsicóticos. El uso del risperdal y otros
antipsicóticos está creciendo en menores en acogida, en los que el “trastorno
bipolar” está substituyendo al “trastorno de conducta”, y en la discapacidad
intelectual y el autismo de Tañer, sin evidencia alguna de que sean
beneficiosos para los pacientes más bien al contrario.
Janssen es
posiblemente la farmacéutica con mayores multas por fraudes de varios
tipos, New York Times, Risperdal, y ligada al
caso Biederman denunciado desde el Senado y desde el New York Times, Artículo New York Times. Biederman
compone probablemente junto con Faraone y el sueco Gillberg la triada más
importante de KOLs (LCOs, líderes clave de opinión) en la promoción mundial del
TDAH (Artículo en la Librería nacional de
Medicina) además de ser el principal promotor en USA del trastorno bipolar
y el uso de antipsicóticos en niños.
Eli Lilly relacionada al
parecer con el “caso Toronto” que involucraba a David Healey, profesor de
psiquiatría en Cardiff y erudito de la historia de la psicofarmacología (Artículo en The Guardian). Lilly fue así
mismo protagonista del asunto de los “documentos Prozac” (Artículo en AHRP);
además
de los “escándalos de Zyprexa” (Artículo en HuffintonPost).
Es la
productora de atomoxetina, o Strattera, importante estratégicamente por su
menor potencial para el abuso y menores problemas con la discontinuación. Podría
tener efectos secundarios, incluidos agresividad e ideación suicida, similares
a algún antidepresivo, y está por esto en la lista del “triángulo negro” en el
Reino Unido, además de llevar en los USA un aviso back box por toxicidad
hepática. Parece haber tenido litigios sobre la patente. Es menos efectiva a
corto plazo que los estimulantes y no hay evidencia de su utilidad a largo
plazo.
Rubió, ligado a
Novartis es decir Ciba Geigy es decir Ritalin/Rubifen ha sido acusada en California
y New Jersey de conspirar para crear un mercado para el Ritalin (Nota informativa).
Rubió promueve
un método diagnóstico genético del que no he sido capaz de encontrar en
internet ninguna referencia en revista profesional o científica que lo valide (Análisis
de ADN). Crucial en la operación española, tiene actividades de formación
y un portal.
Shire una empresa
localizada en la isla de Jersey por razones fiscales y con cuartel general en
Irlanda, clave en el tema del TDAH, con importantes actividades en educación,
propaganda, portal en internet, lobbying del Parlamento Europeo, creación de LCOs y otras actividades. Produce el
adderall, una anfetamina muy recetada en USA , por la que ha tenido litigios
por sobreprecio y la guanfacina, un compuesto que se ha intentado usar en
varios tipos de trastornos, incluidos el TDAH y el autismo, por ahora sin
éxito, y por el que tiene litigios sobre la patente.
Mariano Almudévar
Los laboratorios farmacéuticos que han desarrollado los fármacos
para el TDAH promocionan la detección
de nuevos casos,
de manera
bastante cuestionable Los niños que
toman psicofármacos se convierten en clientes para toda la vida. ¡Los
laboratorios van a por la infancia!
La forma de
promoción del TDAH y de vender sus medicamentos es muy evidente:
·
Conferencias, seminarios de líderes
de opinión.
·
Congresos “científicos” y artículos
en revistas.
·
Financiación de asociaciones de
afectados.
·
Propaganda en blogs, páginas webs,
prensa local, etc.
Son también
evidentes las conexiones entre la industria farmacéutica y un sector de la
psiquiatría y la medicina.
En Estados
Unidos, Lisa Cosgrove (Psicóloga social) denuncia que de los 170 miembros del
grupo que trabaja con el ‘Manual de los trastornos mentales’, el 56% tenía
una o más relaciones financieras con empresas de la industria farmacéutica.
En España la Federación de
Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública denunció en 2013 que el 70%
de los colaboradores y el 50% de los revisores externos de la Guía Práctica
Clínica del TDAH, aprobada en 2010, declaran conflictos de interés y
se detectan intereses cruzados no declarados, que afectan a otros
colaboradores. Han recibido dinero o ayuda de las farmacéuticas implicadas. Además
el profesional más citado en la bibliografía (hasta 16 veces) es Joseph Biederman,
investigado en el senado estadounidense por recibir 1,7 millones de dólares de
compañías farmacéuticas entre 2002 y 2007, tras promover el diagnóstico de
trastornos psiquiátricos en la infancia. También participan en la elaboración
de la guía representantes de la fundación “sin animo de lucro” de la Generalitat de
Cataluña ADANA de apoyo a los afectados por el TDAH, cuya presidenta es Isabel
Rubió, miembro de la familia propietaria de los laboratorios Rubió, que
comercializa uno de los psicofármacos más utilizados en el tratamiento del
trastorno.
Recientemente
(2015) la misma Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública ha
pedido que se retire la
Guía Práctica Clínica del TDAH aprobada por el Ministerio de
Sanidad:
“En
cuanto a los autores debemos señalar que en proporción superior al 75% de ellos
se encuentran inmersos en claros conflictos de intereses con las casas
comerciales. Por todo ello exigimos a las Administraciones sanitarias competentes:
la paralización de la difusión de las citadas GPC”
También son obvias las conexiones entre políticos e industria
farmacéutica:
La LOMCE reconoce
expresamente el TDAH y la necesidad específica de tratar a los niños y adolescentes.
Se incluyó esta enmienda a propuesta de Unión del Pueblo
Navarro y contó con el apoyo del
Partido Popular.
VI. La campaña de expansión del TDAH en España
Hay elementos
para afirmar que estamos ante una campaña de difusión y de expansión del TDAH,
donde las industrias farmacéuticas, los sectores cooptados de la medicina y la psiquiatría,
y los políticos a su servicio están jugando su papel.
Su objetivo
es llegar a un millón y medio de españoles, 300.000 de ellos niños, que
sufren según ellos TDAH, pero que solo el 1% ha sido diagnosticado. El gasto
público farmacéutico en los medicamentos para el TDAH podría alcanzar, de
cumplirse las expectativas de los ponentes del libro blanco para el tratamiento
del TDAH, 1.200 millones de euros anuales, el 12% del gasto farmacéutico
público de 2012, según la
Federación de Asociaciones de Defensa de la Sanidad Pública.
No hay duda de
que con ese dinero, aplicándolo en la mejora del sistema educativo y el apoyo a
los alumnos con dificultades, se podrían alcanzar grandes mejoras para los
niños con dificultades escolares.
Las
herramientas que han desarrollado para conseguir sus objetivos son
principalmente 4:
1. La Guía de Práctica Clínica sobre el Trastorno
por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) en Niños y Adolescentes.
2.
El Plan de Acción sobre Trastorno de Déficit de Atención con
Hiperactividad (TDAH) conocido como Pandah.
3.
El Libro Blanco del TDAH del Parlamento Europeo : TDAH: hacer
visible lo invisible.
4.
Las Federaciones de Afectados por TDAH.
1. La Guía de práctica clínica
Esta guía
básicamente establece que el TDAH existe, que el procedimiento adecuado para
diagnosticarlo es el test del DSM anteriormente mostrado y que los
psicofármacos son la mejor opción para tratarlo. Descarta todos los
cuestionamientos y tratamientos alternativos y toma una perspectiva totalmente
desconectada de las circunstancias sociales de los supuestos afectados.
A pesar de estas recomendaciones, reconoce que:
“no hay acuerdo en nuestro medio acerca de qué instrumentos hay
que utilizar para la evaluación de niños con posible TDAH; también existe
controversia sobre los criterios que se deben emplear para su diagnóstico. Estas
dificultades en la detección, el proceso diagnóstico y la metodología originan
amplias variaciones (geográficas y demográficas), lo que conduce a un
infradiagnóstico o sobrediagnóstico del TDAH. No existen marcadores biológicos
que nos permitan diagnosticar el TDAH. En lo que respecta a las opciones
terapéuticas con fármacos, existe controversia acerca de si usar estimulantes o
no estimulantes como primera elección, si la eficacia persiste en los tratamientos
de más de 12 semanas de duración, si es recomendable suspender la medicación
durante los períodos vacacionales o fines de semana, así como la duración del
tratamiento farmacológico. En cuanto al tratamiento psicosocial, los datos son
contradictorios respecto a la eficacia, la duración y la generalización de los
resultados. Tampoco hay consenso sobre cómo medir la respuesta terapéutica, los
efectos secundarios del tratamiento y la frecuencia de visitas de seguimiento.”
Ha sido denunciada por la Federación de Asociaciones de Defensa
de la Sanidad Pública
por lo siguientes motivos:
1. Todo el equipo
de trabajo pertenece a un hospital privado, Sant Joan de Deu de
Barcelona, perteneciente al Orden Hospitalaria excepto un medico de la Fundación Adana,
patrocina- da por uno de los laboratorios que producen metilfenidato
(Novartis). Nadie del equipo de trabajo pertenece al Sistema Nacional de Salud.
2.
El 70% de los colaboradores y el 50% de los revisores
externos de la GPC
declaran conflictos de interés y se detectan intereses cruzados no
declarados, que afectan a otros colabora- dores. Han recibido dinero o ayuda de
las farmacéuticas implicadas.
3.
No se toman en consideración las conclusiones del informe de la
agencia vasca de tecnologías sanitarias Osteba, sobre “Evaluación de la
situación asistencial y recomendaciones terapéuticas en el TDAH” donde se
afirma que en España se realizan prescripciones fuera de las indicaciones
autorizadas, que no se están siguiendo las recomendaciones sanitarias más
básicas y prudentes en cuanto a la prescripción de metilfenidato, como
son las de la Agencia
Española de Medicamentos (AEMPS).
4.
El profesional más citado en la bibliografía (hasta 16 veces) es
Joseph Biederman, investigado en el senado estadounidense por recibir 1,7
millones de dólares de compañías farmacéuticas entre 2002 y 2007, tras promover
el diagnóstico de trastornos psiquiátricos en la infancia.
5.
Si como se dice en este informe, el 5% ciento de la población
padece este trastorno, el 12% del gasto farmacéutico se dedicara al
metilfenidato.
También ha sido criticada por el Boletín de Información
Farmacoterapéutica de Navarra:
1. De las 73
recomendaciones que emite, sólo 2 relacionadas con el tratamiento presentan un
nivel de evidencia científica fuerte.
2.
Una gran mayoría de participantes vinculados a compañías
farmacéuticas relacionadas con el TDAH.
3.
Subraya el enfoque biomédico frente al psicológico, no abordar
convincentemente la distinta prevalencia del TDAH en función del sexo, cultura
o clase social, ser complaciente con la ausencia de resultados a largo plazo en
variables realmente relevantes.
4.
Un punto clave es el referente a la recomendación de tratamiento
farmacológico en TDAH grave. La principal referencia citada por NICE en su
apoyo consiste en un trabajo firmado por el propio presidente del grupo de
trabajo.
2. Plan de Acción sobre Trastorno de Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) conocido como Pandah.
Incluye un plan
de marketing, para promocionar el TDAH en España y otro plan para vencer las
resistencias que en parte de la población crea el TDAH y para diagnosticar TDAH
a toda la población afectada incluida los adultos.
Pandah es el intento de los laboratorios fabricantes de fármacos
para TDAH de llevar su diagnóstico a las escuelas y al mundo político.
“El
Proyecto PANDAH es una iniciativa de Shire, una compañía biofarmacéutica global
con más de veinte años de experiencia en el TDAH y otras enfermedades
genéticas. El objetivo principal de Shire al promover el Proyecto PANDAH es
mejorar la vida de pacientes y cuidadores a través del trabajo en equipo y
desarrollando una actividad transparente y responsable en busca de nuevas
soluciones. (Literal)”
La persona que
coordina este proyecto es César Soutullo, que en la guía clínica del TDAH de
2010 declaraba los siguientes conflictos de interés por haber colaborado con
muchas farmacéuticas que venden medicamentos para el TDAH:
Cesar
Soutullo Esperón ha recibido apoyo de Almirall-Prodesfarma, AstraZeneca, Lilly,
Esteve, Bristol-Myers Squibb, Janssen-Cilag, Pfizer, Pharmacia Spain para
asistir a cursos y congresos; ha recibido honorarios de AstraZeneca, Lilly,
GlaxoSmithKline, Janssen-Cilag, Novartis y Solvay como ponente; ha recibido
financiación de la
Fundación Alicia Koplowitz, Janssen-Cilag, Juste, Lilly,
Rubió y Shire para programas educativos o cursos; ha realizado actividades de
consultoría para la
Fundación Alicia Koplowitz, Lilly (España y Europa), Juste,
EINAQ (European Interdisciplinary Network ADHD Quality Assurance),
Janssen-Cilag (España y Europa), Pfizer (Global), Shire (Global), Otsuka
(Europa), Bristol-Myers Squibb; tiene intereses económicos como consultor
clínico (jefe clínico) y profesor asociado de la Clínica Universitaria,
Universidad de Navarra y conflictos de interés de índole no económico por
derechos de autor por publicaciones en DOYMA, Editorial Médica Panamericana,
Grupo Correo, EUNSA, Euro RSCG Life Medea; también ha declarado conflictos de
interés no personal por parte de la Fundación Alicia Koplowitz, Lilly y Shire para la
financiación de la creación de una unidad o servicio.
Shire, además
patrocina a la federación de asociaciones de TDAH, FEAADAH.
También impulsa
el denominado programa Pandah financiando la web e influye en la
expansión de ese trastorno mediante el comité asesor y en el científico del
proyecto.
La Dra. María Jesús
Mardomingo, encargada de promover el Pandah, también dice que el medicamento es
seguro y especialmente eficaz. La declaración de conflictos de interés de 2009
de María Jesús Mardomingo Sanz dice que ha recibido apoyo de Janssen-Cilag y
Lilly para asistir
a reuniones y
congresos; ha recibido honorarios de Lilly, Janssen-Cilag y Rubió como ponente,
y ha recibido financiación de Janssen-Cilag y Lilly para la financiación de
programas educativos o cursos.
Hoy se da por bueno el dato de que entre un 50% y un 70% de
los niños diagnosticados de déficit de atención e hiperactividad mantienen
en parte ese diagnóstico a los 25 años y un 15% lo retienen con todos sus
síntomas. Serían un nuevo buen mercado sobre el que los fabricantes de
medicamentos para ello no han prestado la suficiente atención, nunca mejor
comentado.
Algunas perlas
del PANDAH:
Es
necesario que el Centro de trabajo del psiquiatra “crea” en el
trastorno y, en consecuencia, facilite la formación del especialista.
Con la
llegada a la pubertad, puede aparecer el componente negativista desafiante,
dificultando no sólo el diagnóstico, sino también el tratamiento.
Con
frecuencia, los pacientes adolescentes se niegan a ser diagnosticados de TDAH,
por el rechazo a la etiqueta y al estigma social que trae consigo; además de
desarrollar comorbilidades o agravamiento de los síntomas. En el caso de
pacientes adultos diagnosticados en la vida adulta (como algunos de los
participantes en esta primera reunión), con frecuencia la detección del
trastorno se produce a posteriori del diagnóstico de TDAH de uno de los hijos,
dada la alta heredabilidad genética del trastorno.
Uno de
cada diez niños tiene TDAH, lo cual significa que tendrá un rendimiento
académico por debajo de sus posibilidades y problemas de relaciones sociales y
familiares, que afectarán negativamente a su calidad de vida y nivel de
satisfacción en comparación al resto de niños de su edad y grado de desarrollo.
Si estos
niños no son detectados a tiempo y, por lo tanto, no reciben el tratamiento
necesario, cuan- do lleguen a la adolescencia, además de los males típicos de
esta etapa evolutiva, presentarán otras disfunciones que complicarán su
adaptación social y curricular. Son jóvenes “sin expectativas de futuro”, ya
que el TDAH les ha llevado por una historia de fracaso escolar, y es poco
probable que continúen sus estudios. Además, presentan altas probabilidades de
tomar drogas, delinquir, mantener, conductas sexuales precoces o de riesgo,
sufrir accidentes de tráfico, etcétera. Esto lógicamente crea una situación insostenible
y de desasosiego en la familia. Pero como además el TDAH es una enfermedad
crónica, en la vida adulta seguirá cosechando problemas, dificultándole el
acceso al mundo laboral, especialmente de alta cualificación, y acarreándole
problemas de relación social y de pareja y, en los casos más graves, problemas
con la justicia. Este panorama nos da una idea de la gravedad del problema. Así,
desde este punto de vista, el niño con TDAH no es sólo “un niño movido” que
molesta en clase y pega a los compañeros, sino una persona muy vulnerable a la
que hay que ayudar desde todos los ámbitos de la sociedad para evitar que con
los años se convierta en una persona frustrada e insatisfecha de sí misma, y
una carga para su familia y la sociedad en general.
Necesidades detectadas
Para evitar que
el TDAH pueda pasar desapercibido, detectarse de forma tardía o no llegar a
diagnosticarse, los agentes implicados en el Proyecto PANDAH demandan actuar en
las siguientes direcciones:
·
Ofrecer más información y formación a
escuelas, padres y médicos de atención primaria (deben estar formados
para detectar casos de TDAH y para manejarlos de la manera más adecuada).
·
Definir un consenso multidisciplinar
basado en evidencia científica para la puesta en práctica.
·
Incluir el cribado de TDAH en las Revisiones Periódicas de Salud.
·
Implementar programas de detección
temprana.
·
Dar mayor respaldo al médico de
Atención Primaria, especialmente en el caso de los médicos de adultos, ya que
el poco tiempo disponible en consulta para atender a cada paciente y la
ausencia de concienciación hacia el TDAH son dos obstáculos importantes que se
dan en este colectivo.
·
Dotar a todos los actores implicados
en el manejo del TDAH de un protocolo establecido y un mapa de recursos
consensuado.
3. El Libro Blanco del TDAH del Parlamento Europeo: TDAH. Hacer visible lo invisible
Libro Blanco
sobre el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH):
propuestas políticas para abordar el impacto social, el coste y los resultados
a largo plazo en apoyo a los afectados (S. Young, M. Fitzgerald, M.J. Postma).
Este proyecto
ha sido iniciado, impulsado y financiado por Shire AG,
con el apoyo del European Brain Council (EBC) y GAMIAN-Europe (Global Alliance
of Mental Illness Advocacy Networks).
4. Las Federaciones de Afectados
Reciben
subvenciones de las farmacéuticas y colaboran en la detección de nuevos casos.
En 2010, a petición de la FEAADAH el Senado español
aprobó una moción apremiando al gobierno de la nación a actuar en relación al
TDAH. Por tanto, la FEAADAH
acudió al Senado para explicar las necesidades de los afectados por TDAH.
La FEAADAH ha conseguido
que numerosos parlamentos autonómicos aprobaran mociones para poner en marcha
acciones que apoyen el diagnóstico, tratamiento y cuidados de los afectados por
el TDAH y sus familias.
En 2012 la FEAADAH ha colaborado con
el Congreso de los Diputados español para hacer un llamamiento al gobierno de
la nación para declarar un día del TDAH. Además la FEAADAH ha lanzado una
campaña mundial para solicitar a la Organización Mundial
de la Salud que
designe un día de concienciación sobre el TDAH.
En 2012 el
presidente de la FEAADAH
y un psiquiatra representante de otra iniciativa sobre TDAH (el Proyecto
Pandah) comparecieron ante los presidentes de las comisiones de Sanidad,
Educación y Justicia del Senado y del Congreso de los Diputados para hacer un
llamamiento para una acción conjunta de las administraciones públicas en estos
sectores.
Educo-e360
ResponderEliminarInteresante reflexión sobre la polifarmacia en el TDAH. En Educo-e360, creemos en la importancia de un enfoque holístico que incluya programas de apoyo emocional y educativo para un desarrollo saludable.